sábado, 8 de marzo de 2014

SABARÍS 2014

Una vez más, los monaguillos hemos salido de nuestras respectivas parroquias para disfrutar de unos días juntos en Sabarís.
Todo comenzó con una reñida apuesta entre don Javier y don José: ¿Sería capaz don Javier de cumplir con el horario que había programado? don José decía que no.
Al final, don Javier pudo salir victorioso y llegar a Sabarís incluso antes de la hora, un momento en el que los monaguillos recién llegados al punto de encuentro aprovechamos para dar unos paseos al lado del mar, preguntarnos como nos van las notas etc.
El primer día lo dedicamos a la organización de la comida y a echar una buena partida nocturna de lobos, pero lo más intenso llegó los dos días siguientes.
El lunes, después de desayunar, nos fuimos todos a Misa, despues jugamos unos intensos partidos de fútbol en compañía de los ferrolanos,  en los que hubo un claro ganador, comimos y...después de comer llegaría una salida que, sin duda, se nos quedará grabada en la retina por mucho tiempo, ya explicaremos lo de la retina.
Fuimos nada más y nada menos que a las ruinas abandonadas de una antigua base militar en Cabo Silleiro, un lugar que nos conmocionó por su gran belleza. Como era una base militar, nos entraron ganas de paintball, asi que pronto estuvieron listas las armas y con gritos de !por la patria! empezó la guerra.
Unos sobrevivieron y salieron ilesos, pero otros, como Martín, aunque curtidos en las artes de batalla, sufrieron alguna que otra lesión.
Lo más interesante llegaría el último día por la mañana: como siempre y como nunca, Misa a las 11:00, después otra vez a Cabo Silleiro, donde los más atrevidos soldados se atrevieron a bajar a las profundidades de la base militar, armados con linternas y con la protección de nuestro Ángel Custodio, emprendimos un viaje por los pasadizos subterráneos, los búnkers, el interior de las celdas.
Finalmente salimos ilesos y con ganas de volver. Por la tarde se acercaron familiares y párrocos a llevarse de vuelta a los monaguillos.

PDTA: deseamos una pronta recuperación a nuestro general Martín, quien, en su afán de ganar la partida de paintball, sufrio un bolazo en el ojo, del que ahora se está recuperando. Aúpa Martín!!!


Para ver las fotos, teneis aquí un link: pulsa aquí para ver las fotos